Sí. La investigación y la práctica clínica muestran que la terapia online puede ser igual de eficaz que la presencial, siempre que se adapte a las necesidades de cada persona. En el caso del autismo, estudios han demostrado que las intervenciones realizadas por videoconferencia permiten enseñar y mantener nuevas habilidades con éxito en personas con TEA (Tomlinson et al., 2021). Además, revisiones sistemáticas señalan que las terapias teleasistidas mediadas por padres logran mejoras en la conducta y reducen el estrés familiar (Parsons et al., 2023).

En mi caso, adapto el ritmo, las herramientas y la comunicación para que cada sesión sea segura, predecible y respetuosa, integrando estrategias específicas para reducir la ansiedad, favorecer la concentración y potenciar la autenticidad de quienes acompaño.

Si alguna vez has sentido que tienes que “camuflarte” (masking) para encajar, que tu diagnóstico llegó tarde o que necesitas un lugar donde ser tú mismo sin filtros, este espacio está pensado para ti. Aquí encontrarás acompañamiento inclusivo, especializado y libre de juicios.

Trabajo con personas neurodivergentes adultas y adolescentes que buscan apoyo psicológico para gestionar emociones, mejorar su autoestima, afrontar el impacto de un diagnóstico tardío o aprender a convivir con las exigencias del día a día. También acompaño a  parejas para mejorar la comprensión y la convivencia.

Por supuesto. No es necesario tener un diagnóstico previo para comenzar un proceso terapéutico. Muchas personas llegan con dudas, sospechas o curiosidad sobre si pueden estar dentro del espectro autista, tener TDAH o alguna otra forma de neurodivergencia. La terapia puede ayudarte a explorar estas inquietudes, comprender mejor tu manera de pensar y sentir, y darte herramientas prácticas para gestionar tus retos diarios.

En caso de que lo necesites, podemos trabajar juntos en una evaluación más profunda o derivar a procesos diagnósticos especializados, siempre desde un enfoque respetuoso, sin prisas ni presiones. El objetivo inicial es que tengas un espacio seguro para entenderte mejor y sentir alivio, independientemente de que haya un diagnóstico confirmado o no.

En ese caso, este espacio no sería el más adecuado para ti. Mi trabajo está especializado en el acompañamiento a personas neurodivergentes (TEA, TDAH, altas capacidades) y en temáticas vinculadas, como el diagnóstico tardío, la autoestima, el masking o el impacto emocional de sentirse diferente.